Más de 600 familias de la Villa Molino del Sol, Arauco; Villa Camilo Escalona, Lota; La Peña II, Coronel; y Villa San Francisco, Rengo, tomaron el gran desafío de bajar el consumo de agua, participando de Mi Barrio Sustentable, programa de la Empresa Essbio y Fundación Urbanismo Social, que se desarrolla en barrios de vivienda social.
El programa, en los cuatro barrios antes mencionado, duró 8 meses, llegando a su termino durante diciembre de 2016. “Buscamos crear conductas eficientes, promoviendo el consumo responsable – individual y colectivo – del agua potable, para que las personas gasten lo que efectivamente puedan pagar”, explica Pía Soto, Directora Nacional de Barrios de la Fundación Urbanismo Social.
Mi Barrio Sustentable de Essbio, se ha desarrollado desde el año 2014 en tres regiones del país, impactando a más de 3.300 familias. Sergio Giacaman, subgerente de Relación con la Comunidad y RSE de Essbio, da a conocer que “el objetivo principal es evitar el endeudamiento de las familias, para lo cual se realizan talleres educativos donde se enseña desde cómo interpretar los datos de la boleta, hasta manejar distintas técnicas de uso sustentable del recurso hídrico”.
“Los consejos me sirvieron mucho, ya no dejo la llave corriendo cuando me lavo los dientes y me ducho en 3 minutos”, cuenta Hugo Villa, presidente de Villa Camilo Escalona.
Por su parte, Sergio Salazar, presidente de la Junta de Vecinos de Villa Molino del Sol de Arauco, saca cuentas alegres, especificando que “el ahorro ya se notó y lo aprendido en las charlas educativas está dando resultados, debido a que las familias ya han visto bajas en sus cobros”.
Las personas pueden medir su eficiencia hídrica mediante un informe detallado que les llega junto con la boleta. Efizity realiza esta tarea, formulando un ranking comparativo del gasto de agua de cada hogar participante, propiciando una competencia positiva entre familias compuestas por el mismo número de integrantes.
Por otra parte, durante el programa, los vecinos eligen un espacio deteriorado y significativo para la comunidad con el fin de recuperarlo. En este caso Conaf ha jugado un rol importante, y en Villa Molino del Sol por ejemplo, los vecinos eligieron un área que se estaba convirtiendo en un basural, para transformarlo en un espacio de encuentro comunitario, con una gruta, bancas, sombreadora y árboles.
Esta acción le da la sostenibilidad a todo este esfuerzo, ya que fortalece la organización del barrio, los une por un propósito común, que es el ahorro del agua, y al mismo tiempo los motiva a cuidar su entorno y a mantener una relación positiva y cercana con la empresa Essbio de manera permanente.