El proyecto tiene como objetivo contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de Puerto Octay, trabajando en el deterioro urbano y problemas de segregación y vulnerabilidad social, a través de un proceso participativo con la comunidad.
La llegada de la fundación a Puerto Octay significa nuevas experiencias y desafíos al ser un territorio en el que no han trabajado. La comuna tiene poco más de 10 mil habitantes y está ubicada a la orilla del Lago Llanquihue en la región de Los Lagos. Fundada el 22 de diciembre de 1891 llegó a ser uno de los puertos más importantes del Lago como parada estratégica entre de conexión con Osorno y otras localidades. Sin embargo en los últimos 30 años su desarrollo se ha visto estancado, lo que ha provocado una importante migración de la población más joven hacia otros centros urbanos en búsqueda de oportunidades laborales.
En esta línea, Urbanismo Social llega a Puerto Octay con el programa del Ministerio de Vivienda y Urbanismo “Quiero Mi Barrio”, el cual de poco se está incorporando a comunas más pequeñas. Según cuenta Alejandra Pavez, secretaria técnica del programa, en los 14 años que lleva en funcionamiento, el foco ha sido los diferentes sectores de las grandes ciudades de Chile.“Estamos felices de implementar esta iniciativa en Puerto Octay, creemos que va a ser muy positivo para el lugar y la comunidad, ya que estaremos 3 años y medio con ustedes, mediante una construcción en conjunto para crear el barrio que queremos”, señala Pavez.
La iniciativa tiene por objetivo contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad, trabajando el deterioro urbano junto a problemáticas de segregación y vulnerabilidad social, a través de un proceso participativo, con un trabajo social enfocado en que las personas decidan sobre el barrio que quieren, dejando además capacidades instaladas en los dirigentes y vecinos.
Ángela Mimica, coordinadora del proyecto dice que para la Villa esto significa un gran cambio al promover la participación de los vecinos y vecinas, quienes al involucrarse pueden construir el hábitat que quieren. “El proyecto Quiero Mi Barrio viene a enmendar el cómo se construía ciudad sin reconocer con suficiente fuerza la dimensión social y humana. Desde Urbanismo Social sabemos que esto no puede ser así y que debemos poner en el centro a las personas, siendo un principio que está en este programa del MINVU”; señala Mimica.
El programa “Quiero Mi Barrio” se presenta como una oportunidad para detonar un proceso de renovación urbana que sea capaz de reactivar la economía de la localidad, manteniendo a la vez su patrimonio natural y arquitectónico.
